Hablar de los caracoles, es hablar de unos animales muy distintos a los demás, sobre todo por la forma en que estos se reproducen, lo cual dista mucho de la manera en que la hacen otras especies.
Los caracoles son poseen una particularidad que muy pocos animales tienen, y es que estos son hermafroditas, así que en ellos se encuentran presentes tanto el aparato reproductor masculino, como el aparato reproductor femenino.
Sin lugar a dudas, estos animales son muy llamativos para cualquiera ante unas características tan inusuales y especiales como la mencionada, pero que poseen otros atributos que seguro te sorprenderán, así que continúa leyendo este artículo si quieres enterarte de más cosas sobre este animal.
Reproducción de los caracoles
Como mencionamos, se trata de un animal que puede cumplir ambos roles en el acto de apareamiento, gracias a que posee los dos aparatos reproductores para ello, a diferencia de otros animales.
La esperanza de vida de los caracoles está entre los cinco y siete años, alcanzando su madurez sexual cuando cumplen un año, lo que les permite una alta tasa de crecimiento.
En cuanto al apareamiento de estos animales, pocos lo saben, pero si realizan rituales para consumar el acto, el cual puede tener una duración entre dos y doce horas, en las que las parejas interactúan entre sí, algo que es posible porque tienen sus aparatos reproductores a los lados de su cuerpo.
Al iniciar el proceso cada caracol se encargará de fertilizar huevos en su pareja, los cuales pueden ser hasta unos 100, y fecundados comenzarán a crecer para posteriormente ser enterrados en la tierra cerca de rocas u otras zonas sólidas que permitan la protección de estos ante posibles depredadores.
Nacimiento de los caracoles
Los huevos que son enterrados deberán permanecer ahí por unas cuatro semanas, tiempo en el que saldrán finalmente de sus cascarones y a partir de ese momento comenzará su modo de supervivencia, ya que estos en un principio poseen conchas que son muy delgadas y frágiles, por lo que buscarán consumir de forma inmediata calcio que les permita endurecerlas.
El proceso de fortalecimiento de la concha del caracol recién nacido tarda aproximadamente tres meses, siendo su principal recurso la propia cáscara de su huevo y de ser posible el de sus hermanos que nacieron al mismo tiempo.
La reproducción de los caracoles sin duda es un tema muy fascinante, dado por el proceso de adaptación que tienen estos animales, algo que les ha permitido sobrevivir durante muchos años y que seguro les permitirá seguir mucho tiempo más.